El suceso se produjo la noche del viernes tras el partido del Celta
El partido que enfrentó al Celta contra el Málaga
en Balaídos el pasado viernes acabó en disturbios. La Policía Nacional
detuvo a cuatro jóvenes por su presunta vinculación con actos de
violencia callejera al finalizar el encuentro. Los cuatro pasaron a
primera hora de la mañana de ayer a disposición del juzgado de
instrucción número 6 de Vigo, en funciones de guardia, y quedaron en
libertad con cargos acusados de un presunto delito de atentado contra
agentes de la autoridad.
Se les acusa de haber arrojado botellas de
cerveza contra las fuerzas del orden que se encontraban realizando
labores preventivas con motivo del encuentro deportivo. Varios grupos de
jóvenes, algunos con cabezas rapadas, profirieron insultos contra los
agentes uniformados, que recibieron varios impactos de botellas, por
parte de algunos de ellos, que acto seguido echaron a correr.
El despliegue policial se desplegó hacia la calle
Manuel de Castro, donde varias dotaciones rodearon a los jóvenes que
protagonizaron los actos violentos. Algunos se refugiaron en un par de
taperías de la plaza ubicada frente al estadio. Testigos presenciales
destacaron que la respuesta policial se llevó a cabo con una gran
contundencia y que los arrestados fueron fuertemente reducidos antes de
ser esposados y conducidos a los calabozos de la comisaría.
Uno de los vecinos que contempló la escena desde
el portal de su vivienda señaló ayer las manchas de sangre que quedaron
en el lugar donde se practicaron las detenciones. Por estos hechos, los
agentes intervinientes en la operación también deberán prestar
declaración en los juzgados la próxima semana.
La propietaria de uno de los establecimientos de
hostelería donde se refugiaron los jóvenes señaló que los agentes
antidisturbios irrumpieron de repente en su local, donde había varios
clientes tomando algunas consumiciones, que se vieron sorprendidos con
la operación policial. «Hubo quien llevó sin comerlo ni beberlo», señaló
la hostelera, que bajó las persianas de su negocio una vez que los
agentes abandonaron el lugar, quedando algunos clientes dentro del
establecimiento.
Varias patrullas de la Policía Nacional tomaron
las inmediaciones del campo de Balaídos para perseguir a los jóvenes que
les habían atacado a la salida del encuentro deportivo. Se trata de los
actos violentos más graves que han sucedido durante los últimos tiempos
tras la finalización de un partido de fútbol. Al parecer, los detenidos
son hinchas radicales del equipo celeste que salieron furiosos de
Balaídos después de tener que encajar dos goles por parte del equipo
visitante.
http://www.lavozdegalicia.es/noticia/vigo/2014/03/23/cuatro-detenidos-arrojar-botellas-policia-balaidos/0003_201403V23C5991.htm?utm_source=buscavoz&utm_medium=buscavoz
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